The Covid vaccines were delivered under emergency authorisation and utilised experimental technology. Since the Nuremberg Code was established in 1947, it has been a core tenet of medical ethics that any experimental medical intervention requires informed consent. What if, heaven forbid, there had been widespread catastrophic long-term health impacts? It is an indisputable fact that the UK adult public were urged, en masse, to take up the vaccines, regardless of age or risk profile. Van-Tam repeatedly made persuasive televised public statements urging everyone to come forward for their vaccine. And he may not have been wrong to do so. But care-home workers were dismissed from their jobs if they declined vaccination. Van-Tam expressed support for the concept of compulsory vaccines for NHS staff. He indicated he could support vaccine passports, stating on Good Morning Britain: “There are plausible arguments for, and plausible arguments against …” Yet how could vaccine passports be compatible with upholding the right of individuals to take informed, independent decisions? If the UK Covid Inquiry is to learn lessons from the successes and failures of our pandemic response, it is vital that witnesses act with honesty and integrity. Van-Tam has not been willing to provide direct answers to these fundamental questions.

Las vacunas Covid se entregaron bajo autorización de emergencia y utilizaron tecnología experimental. Desde que se estableció el Código Nuremberg en 1947, ha sido un principio de ética médica que cualquier intervención médica experimental requiere consentimiento informado. ¿Qué pasaría si el cielo no lo permita, hubo impactos catastróficos para la salud catastróficos a largo plazo? Es un hecho indiscutible que se instó al público adulto del Reino Unido, en masa, a asumir las vacunas, independientemente de la edad o el perfil de riesgo. Van-Tam hizo repetidamente declaraciones públicas televisadas persuasivas instando a todos a presentarse para su vacuna. Y puede que no se haya equivocado al hacerlo. Pero los trabajadores de hogares fueron despedidos de sus trabajos si rechazaron la vacunación. Van-Tam expresó su apoyo al concepto de vacunas obligatorias para el personal del NHS. Indicó que podía apoyar los pasaportes de vacuna, declarando en Good Morning Britain: "Hay argumentos plausibles y argumentos plausibles contra ..." Sin embargo, ¿cómo podrían los pasaportes de la vacuna ser compatibles con la defensa del derecho de las personas a tomar decisiones informadas e independientes? Si la investigación covid del Reino Unido es aprender lecciones de los éxitos y fallas de nuestra respuesta pandemia, es vital que los testigos actúen con honestidad e integridad. Van-Tam no ha estado dispuesto a proporcionar respuestas directas a estas preguntas fundamentales.