This is because some on the Left have convinced themselves – and others – that they are right, even when they are wrong. They adopt hashtags like #bekind and preach “gentler, kinder politics” when their own behaviour is far nastier than anything Kirk has ever said. Labels are quickly invented to scare people into submission. Those expressing concerns about gender identity are labelled “transphobes” or “Terfs”. Question lockdown and you’re an anti-vaxxer. Highlight the worrying rise of Islamic extremism, and you’re “Islamaphobic”. Think net zero might be a waste of taxpayers’ money? You’re a climate change denier. Show support for Israel and you’re a genocidal maniac. The irony of all this is that this suppression of freedom of expression has only served to bring out the worst in those seeking to silence the Right. They have become the new bigots. Supporters of George Floyd chanted his dying words: “I can’t breathe”. For Kirk and fellow conservatives, the mantra of recent years has been: “I can’t speak”. Not freely, anyway. What’s changed since Wednesday’s atrocity at Utah Valley University is that we are no longer in danger of being censored or even cancelled for our beliefs – but killed. A political assassination in the name of progressiveness? Charlie Kirk argued that “political correctness is the deadliest of political weaponry”. His killer proved him right.

Esto se debe a que algunos de la izquierda se han convencido a sí mismos, y a otros, de que tienen razón, incluso cuando están equivocados. Adoptan hashtags como #bekind y predican "política más suave y más amable" cuando su propio comportamiento es mucho más desagradable que cualquier cosa que Kirk haya dicho. Las etiquetas se inventan rápidamente para asustar a las personas para que se sometan. Aquellos que expresan preocupaciones sobre la identidad de género se etiquetan como "transfobes" o "TERF". PREGUNTO DE PREGUNTA y eres un anti-vaxxer. Destaca el preocupante surgimiento del extremismo islámico, y eres "islamafóbico". ¿Crees que Net Zero podría ser una pérdida de dinero de los contribuyentes? Eres un negador de cambio climático. Muestre apoyo a Israel y eres un maníaco genocida. La ironía de todo esto es que esta supresión de la libertad de expresión solo ha servido para sacar lo peor en aquellos que buscan silenciar el derecho. Se han convertido en los nuevos fanáticos. Los partidarios de George Floyd cantaron sus palabras moribundas: "No puedo respirar". Para Kirk y otros conservadores, el mantra de los últimos años ha sido: "No puedo hablar". No libremente, de todos modos. Lo que ha cambiado desde la atrocidad del miércoles en la Universidad de Utah Valley es que ya no estamos en peligro de ser censurados o incluso cancelados por nuestras creencias, sino asesinados. ¿Un asesinato político en nombre de la progresividad?Charlie Kirk argumentó que "la corrección política es la más mortal del armamento político". Su asesino lo demostró bien.